No me
enfrentro, no condiciono, no me me asusta aunque escondido me encuentro, solo
es el paso de los días, las horas, un minuto, ese tiempo que me aprieta y me
invade, ese tiempo que me hiere cuanto quiere y sin quererlo lo puede, lo puede
casi todo, o el parte de un todo, la desconfianza y el nerviosismo, esos van de
la mano, que tras de si se va apagando por la madurez que se va acercando, y
tras de si estas tu, con tu aura que todo lo cura y a mi me estremece sin
censura, a través de esa cortina de azúcar que encierran tus ojos te miro y me
transportan a la locura, no masifico, mas bien minimizo en expresiones, no
siempre se juega con un condicionante tan verídico, que rompe la regla de este manifiesto que es mi
camino pero no cabe en ningún agujero el vacio que me esta dejando tu asencia,
tu cariño, tus caricias, tus deseos, una mirada, un silencio, una sonrisa....
ese beso.